Hernia discal, tratamientos naturales que nos ayudan a mejorar.




Nuestra columna vertebral está formada por unos huesos llamados vértebras y unos discos que son los que nos permiten poder movernos, agacharnos y no sentir dolor.
Cuando uno o más de estos discos sufre una lesión y se escapa de entre los dos huesos provocando una presión de los nervios alrededor de la espina dorsal, recibe el nombre de hernia.

Síntomas de la hernia discal

El dolor provocado por este aprisionamiento del nervio produce dolor en toda la espalda, sigue por la pierna y en muchas ocasiones llega al pie. Se puede ver afectado la rodilla, sobre todo su parte posterior.
Es el nervio ciático el que siente la presión, por ese motivo el dolor recorre toda la pierna.
Caminar, toser, estornudar o simplemente estar sentado nos provoca un dolor severo en toda esta parte afectada.
El dolor nocturno puede llegar ha ser insoportable.
Aunque es más normal sufrir una hernia discal a partir de los 30 años no debemos descartar que la enfermedad pueda aparecer en cualquier edad.
Lumbalgias repetitivas pueden ser un aviso de hernia discal.
El 30% de la población sana que tiene protrusiones o hernias discales que no causan ningún síntoma también puede tener algún día un dolor de espalda común causado por un mal funcionamiento de la musculatura o a una contractura muscular.

Síntomas de la hernia de disco cervical
Dolor cervical, especialmente en la parte posterior o lateral
Dolor profundo, cerca o sobre las paletillas del lado afectado del hombro
Dolor irradiado al hombro, parte superior del brazo, antebrazo y en ocasiones a la mano, los dedos o el tórax
Empeoramiento del dolor al toser, hacer esfuerzos o reír
Incremento del dolor al doblar el cuello o girar la cabeza hacia un lado
Espasmo de los músculos cervicales
Debilidad de los músculos del brazo
Cómo podemos desinflamar esa hernia
Para empezar la mejor forma de tratar la hernia es llevando una vida sana, lo mejor es prevenir esa hernia discal, y la nutrición es el pilar de la prevención.
Es necesario mantener unos hábitos de vida saludables, ejercicios como yoga, taichi, natación, pesas y sobre todo estiramientos adecuados para mantener flexible la columna vertebral.


Una alimentación basada en alimentos refinados e industrializados, carne, lácteos, es una alimentación inflamatoria , acidificante y desanconsejable.


Remedios naturales de medicina alternativa para el lumbago, la ciática y las hernias de disco.

Infusión de tomillo, orégano y cola de caballo.

Se pueden calmar los dolores de ciática con una infusión de diferentes hierbas, cuya acción conjunta es anti infecciosa, anti inflamatoria v astringente.

Ingredientes
1/2 lt de agua
1 pizca tomillo
1 pizca de cola de caballo

Preparación
1. Hervir las plantas a fuego lento durante cinco minutos.
2. Dejar reposar diez minutos.
3. Colar y guardar.

Forma de tomarla
Tomar tres tacitas templadas al día siempre antes de las comidas. El tratamiento se puede prolongar, si conviene, hasta sesenta días.


Emplasto de arcilla y repollo
El siguiente remedio está indicado para el lumbago y la hernia discal.
Ingredientes
3 cucharadas de vinagre de manzana
½ kg de polvo de arcilla
1 lt de agua mineral
3 hojas de repollo
Preparación
1. Poner la arcilla en un bol
2. Mezclar con agua hasta hacer una pasta
3. Añadir el vinagre de manzana y dejar reposar
Aplicación
1. Cubrir la zona dolorida con una capa de la mezcla preparada.
2. Taparla con hojas de repollo y sujetar con un paño.
3. Mantenerlo durante doce horas.
La arcilla es muy utilizada para calentar la zona dolorosa y conseguir calmar el dolor, bajando a la vez la inflamación.



El aspecto emocional también debe atenderse.
Sobrevienen en las personas con estas dolencias un exceso de reflexión, o de preocupación. En muchos casos la persona se manifiesta obsesiva y no puede quitarse ideas de la cabeza. También suele coincidir que son personas en exceso trabajadoras y que tienen muy asumido el mensaje “deprisa, deprisa”. En realidad son” máquinas de trabajo que no paran” y solamente una enfermedad que les ataque a su locomoción puede frenarles un poco porque ellos seguirán trabajando hasta que el dolor los pare de golpe. El descanso, el ejercicio moderado, el no levantar pesos y una corrección postural también serán necesarios para su recuperación.


En todos los casos le recomendamos consultar con su médico, terapeuta u otro profesional de la salud competente. La información contenida en este artículo tiene una función meramente informativa.